miércoles, 5 de julio de 2017

El camino hacia el Ironman de Vitoria: la rotor sierra norte

Al día después del acuatlón tocaba la cicloturista rotor sierra norte, que no la quería para otra cosa que hacer km de calidad y con puertos, que no había subido ninguno en todo el año. Un buen madrugón para ir camino, nuevamente, de Buitrago, puesto que la salida era a las 8 de la mañana.

A las 6 de la mañana todavía hacía una temperatura agradable, pero eso iba a durar poco. De Trimad fuimos Quique, al que hacía mucho que no veía, Sergio, Nacho y Alberto (a la larga), más algunos que fueron a la distancia corta como Miguel, Noe y Sandra.

Antes de salir todo era felicidad jejeje

En las cicloturistas se va rápido...muy rápido jejeje, durante los primeros 15 km intenté seguir a Sergio, pero aguanté solo unos 10 jajaja...así que decidí ponerme en otra grupeta más acorde a mi ritmo hasta llegar a Canencia.

Conocía la mitad del recorrido, pero la parte más dura, la que subía el Puerto de la Puebla, era totalmente desconocida, y eso, no nos vamos a engañar, se suele pagar jejeje. Fui con algún grupo que otro hasta el avituallamiento en lo alto de Canencia...a partir de ahí todo se desperdigó bastante y fui en solitario, hasta bustarviejo donde me encontré con un ciclista bastante más mayor que yo, pero que como le daba, con el que fui todo el camino hasta poco antes de llegar.

En plena subida a Canencia

Pasada las 10 de la mañana el calor ya se iban notando...El tramo de antes de llegar al pueblo de La Puebla (y antes de iniciar la subida al puerto) es horroroso...un asfalto en pésimas condiciones y peligroso, pero bueno se hizo. Avituallamiento en el pueblo y empieza el infierno.

En plena bajada de Canencia :D

El puerto empezaba en el km 96...hasta ahí había mantenido una decente media de 26...y pensaba que iba bien la cosa...pero a los 2 km del puerto empiezo a notar que me pesan las piernas...(normal dado el tute de semana que llevaba) y empiezo a dudar de ser capaz de subir alguna rampa dura... Un poco más adelante decido parar a la sombra, mear, tomarme un gel, echarme un poco de agua por la cabeza.....la verdad es que me viene bien y corono el puerto mejor de lo que lo he empezado.

Se supone que ahora empezaría un tramo de bajada....pero este dura apenas 3 km, antes de comenzar los, probablemente, 35 km más eternos de mi vida...Qué terreno más pestoso!!! ni un km llano, todo sube y baja...realmente más sube que baja....son casi las 2 de la tarde y los 4-5 que nos juntamos (atrás ya había quedado mucha gente fuera de controlo) estamos llegando al pueblo de El Cardoso, pensando que es último puerto....y que el avituallamiento estaría allí (como marcaba la hoja de ruta).

Coronando el primer tramo de la Hiruela

Doble error...ni último puerto, ni avituallamiento. Hay que subir los apenas 3 km de El Cardoso, para tener el último avituallamiento, antes de afrontar nuevamente el, ya sí, sexto y último puerto del día, nuevamente la Hiruela, por el lado largo. Hace mucho calor...hay una fuente muy fresquita y tentadora....cabeza para dentro, ¡qué gusto!...coca cola, gel, sandwich...y cabeza nuevamente debajo de la fuente...

A partir de aquí quedarían unos 25 km, en teoría solo era subir la Hiruela (unos 5 km) y todo casi descenso hasta Buitrago. Reanudo la marcha, y tras 2-3 km de bajada, llego al cruce en el que empezamos a subir la Hiruela, giro y....se me va la bici para un lado porque la cabeza se va para otro...siento como si me fuera a desmayar, intentó dar un par de pedaladas más, pero lo mismo, no soy capaz de controlar la bici. En estas situaciones lo tengo claro, parar y al suelo...si me desmayo, del suelo no me doy un buen golpe. Pero me costó parar...casi me caigo porque no tenía fuerzas para sacar la cala del pedal...me temblaban las piernas...me siento en el suelo y noto el brazo dormido.

Me miro el pulso, veo que está en orden...bueno algo bueno, no me voy a morir ahí jejeje. Sabía que abajo había una ambulancia y les digo a unos compañeros que venían detrás que la llamaran. Me preguntan que qué me pasa, se lo cuento. Me dicen que se quedan conmigo un rato (en realidad aprovecharon que uno había pinchado jajaja), mientras arreglaban el pinchazo. Nos ponemos a la sombra, bebo un poco de agua, me echo una poca por encima....Todo apuntaba a un golpe de calor.

Les digo que como luego es todo cuesta abajo, voy a intentar coronar con ellos la Hiruela. Reanudamos la marcha y a un ritmo lento pero seguro llegamos casi hasta la cima...cuando vuelvo a sentir las piernas raras. Les digo que tiren, que voy a coronar a pie (apenas eran 500 m) y ya vería en la bajada.

A tenor de la hora de la foto...aquí estaba dando lo último que me quedaba, coronando por última vez la Hiruela


Casi las 4 de la tarde ya. La media había bajado por debajo de los 22...tremendo. Corono a pie, me monto en la bici, ya con el coche escoba detrás mío, e inicio la bajada....no me fío, noto la cabeza extraña...bebo...y al minuto, noto la boca seca nuevamente...no es normal. Recuerdo que no es todo bajada lo que queda, que todavía falta el tramo de la presa hacia Buitrago y eso son otros 4-5 km picando hacia arriba y con viento en contra para rematar la faena. Pienso en muchas cosas, pero sobre todo en 2...el entrenamiento con 145 km y 6 puertos ya estaba hecho, y la edad para hacer tonterías ya se había pasado hace mucho.....veo una fuente a la sombra y decido pararme y abandonar por primera vez en mi vida, a falta de 20 km.

Aviso, me recoge el coche escoba y vamos pasando a los últimos que intentaban llegar a duras penas, mientras por la radio van comunicando desmayos, vómitos...hice bien en abandonar...otro día, quizá, os cuente el verdadero motivo que me hizo abandonar ;).

Ya un poco recuperado :)

Para todo hay una primera vez en la vida...y me toco no acabar una prueba por primera vez :), y no es el fin del mundo :).

Todavía quedaría un finde más dentro de esta locura de fines de semana consecutivos compitiendo. Al siguiente iríamos a Vitoria a reconocer el circuito de bici y hacer una travesía, aunque no de carácter competitivo. Pero eso, para el último capítulo del camino hacia Vitora...ahora que lo pienso, lo podía haber llamado Road to Vitoria, quedaba más chulo jajaja.

martes, 4 de julio de 2017

El camino hacia el Ironman de Vitoria: Acuatlón de Dani Molina

Cuarto consecutivo y último fin de semana de competiciones y vaya finde esperaba. El sábado el Acuatlón Dani Molina y el domingo la cicloturista Rotor Sierra Norte.

El Acuatlón consiste en nadar y correr. Este en particular se celebra en el Azud de Pareja, una especia de lago cerca de Sacedón, lugar habitual de nuestros entrenamientos a partir de mayo, y encima estaba organizado por nuestro entrenador de natación, el gran Dani Molina, por lo que no había excusa para no hacerlo.

Me apunté a la distancia olímpica, 1500 nadando y 10 corriendo y después del calentón del Ecotrimad y teniendo en cuenta que al día siguiente tocaban 166 km de bici, con 3000 metros de desnivel, la pauta era sencillo...ritmos cómodos, a modo de entrenamiento.

Entre los que organizaban y los que competíamos, tanto en sprint como en olímpico, la representación del Club Trimad fue muy amplia. Con mucho calor (cerca de 34 grados a las 12 de la mañana, hora de la salida), tomamos la salida y decidí nadar suave, intentando coger un ritmo que sería el que llevara para Vitoria. Los primeros 300 metros los hago a la par de Juancho, entonces creo que voy un poco más rápido de lo que querría y decido aflojar. Seguir la referencia de Juancho es fácil, porque su neopreno es naranja y a poco que levantas la cabeza lo ves jajaja. Se escapó unos 60 metros y mantuve esa distancia cómoda.

Viva el Club Trimad!

Al empezar la segunda vuelta, vi que se alejaba un poco más y, sobre todo, que me pasaban algunos por detrás....deduje que había bajado demasiado el ritmo jajaja, así que volví a apretar a ver si pillaba a Juancho. Estuvo a punto de hacerlo, pero el cabrito ha mejorado mucho y no le dí caza por unos segundos. Al final salieron algo más de 35 minutos, aunque es verdad que me marcó 1700 m...así que ese sería un ritmo aproximado para Vitoria, cerca de 2 min el 100.

Una transición bastante rápida (es una gozada quitarme el neopreno sin problemas...al parecer me he tirado 4 años con uno que me quedaba muyyy pequeño) y comenzaba la carrera. Enseguida me doblan Alberto, Nacho y Sergio, pero esa no es mi guerra. Como casi siempre, voy un poco hinchado, pero el recorrido es totalmente llano y sin ninguna dificultad exceptuando el intenso calor.

Qué gusto quitarse un neopreno rápida y fácilmente

Nuestros compañeros que hacían el sprint nos grabaron y nos hicieron fotos mientras competíamos, y es un reflejo del gran ambiente que tenemos en este club :). No sólo pensamos en nosotros mismos, sino en todos nuestros compañeros :).

Si....iba tocándome los huevs un poco jajaja
Hasta hacía la ruleta y todo de lo tranquilo que iba :D

Finalizo en 51 min, los 10 km...a 5:15...no está mal. El día siguiente sería otra historia.









lunes, 3 de julio de 2017

El camino hacia el Ironman de Vitoria: Ecotrimad

Una vez más, a Ecotrimad, y sería la quinta vez consecutiva desde aquel sprint en el que tan mal lo pasé hace 4 años. Esta vez opté por la distancia olímpica para seguir mi preparación para Vitoria.

Pensaba tomármelo más como entrenamiento que como competición, pero a lo largo de la semana decidí cambiar la mentalidad. En la salida del domingo en bici me vi fuerte y dije...pues vamos a ir a romperlo, a ver qué tal se da. La previsión del tiempo daba tormenta desde mediodía...la tormenta se retrasó, pero llegó.

Fuimos en representación de Trimad, Juancho, Rafa y yo, los 3 a la misma distancia. El objetivo era bajar de 3 horas. Según se acercaba la hora de salida, nada hacía presagiar que hubiera tormenta durante la natación...la bici sería otra historia.

Los 3 grandes!

En la natación no me había planteado ningún objetivo, como siempre, intentar rondar los 40 minutos y si bajaba bien, de lo contrario, a seguir. Esta distancia olímpica tenía trampa, puesto que el sector de natación era la distancia de un half (1900) en vez de un olímpico (1500). El recorrido era el de siempre, y también como siempre, se me hizo muy larga el tramo hasta el giro de la penúltima boya. Esta vez opté por mirar el reloj solo cuando saliera...y 40 min y 29 segundo, contento porque bajé casi 5 minutos mi mejor tiempo en estas aguas, pero jodido porque por 29 segundos no bajé de los 40 jajaja. Veo a Juancho salir unos segundos detrás, que también ha hecho una gran natación, es increíble lo que ha evolucionado de diciembre a junio!.

Vamos arriba!!!

Todo poderío!
Este año cambiaron la transición y había que recorrer medio pueblo descalzo hasta el colegio gredos. Vino bien para ir quitándote el neopreno (que además lo estrenaba). Ya en la transición empiezan a caer las primeras gotas. Yo quería evitar la tormenta en el tramo de bajada hasta la presa, que es bastante rápido, y por suerte, así fue. Me sentía fuerte, empecé a pasar ciclistas, subimos la presa, bajamos, giramos para coger la carretera hacia Berzosa y....comienza el infierno.

La esperada tormenta hizo acto de presencia, pero no esperábamos tanta virulencia. Lo que en un principio era lluvia fuerte, al poco tiempo se convirtió en granizo...sí, granizo muy grande y muy duro jajaja. Los cascos y las bicis sonaban que daban gusto cuando el granizo chocaba con ellos.

Subiendo la presa...aquí no se nota, pero el fondo parecía Mordor...y lo era...

A pesar de todo seguí bastante fuerte en la bici y acabé los 37 km (con 550 m de desnivel) en 1:16:35...casi a 30 de media. Tenía razón iba fuerte.

En la carrera, salió el sol y la temperatura subió bastante. Aquí me costó más, porque iba un poco hinchado y el recorrido, aunque decían que lo habían suavizado, a mí me pareció más duro incluso que el original del half de 2014. En la presa me cruzo con Juancho, el pobre va sufriendo mucho, pero sé que lo conseguirá. Técnicamente hice los 10 km en 49:29, pero no fueron 10, más bien 9,5, pero acabé el tri en 2:56:29, lo que se convertía en el mejor triatlón que había hecho nunca (en cuanto a ritmos se refiere).

Voy sobraoooo

Último esfuerzo!
Y se acabaron los triatlones de preparación.


fotazaaa